La moda en los años 90 no estuvo caracterizada por un estilo específico, sino que más bien se definió como un impulso de las personas por marcar su individualidad a través de la ropa. A esto se sumaría el aporte de algunas tendencias musicales.
Lo que sí está claro, es que en estos años se relajó la atmósfera ochentera, típicamente fastuosa y exuberante, para dar paso a la simplicidad y a la comodidad. Es así que el prét-a-porter adquiere relevancia para la mujer.
En líneas generales, se destacan como usuales los pantalones de tiro bajo, los escotes prominentes y el jean que no pierde la presencia que tenía en los ochenta, sino que por el contrario, llega para quedarse; los desteñidos y rotos eran “plaga”.
Por su parte, las remeras cortas hasta el ombligo, resultaron ideales para lucir piercings y tatuajes. En cuanto a los accesorios, el uso de carteras y cintos se mantuvo.
Hay que destacar que la moda de esos años absorbió las influencias de algunos géneros musicales. Se puede advertir que el estilo Grunge, cuyo principal exponente fue Kurt Cobain, del grupo “Nirvana”, se hacía sentir sobre todo en Norteamérica, con pantalones desgastados y camisas a cuadros. El Rap también aportó lo suyo con pantalones y remeras sueltas, además de las características gorras de visera.
En cuanto al pelo, aunque en esta década se hace más común el uso de tinturas, las mujeres también comienzan a valorar el cabello más natural, largo y sin tanto accesorio, por lo cual el spray deja de utilizarse de forma excesiva. El cabello largo en los varones también fue muy característico de 90.
Fueron tiempos gloriosos para las supermodelos como Claudia Schiffer, Naomi Campbell y Christy Turlington, por nombrar algunas. Esto impuso una norma de delgadez que se trasladó pronto al común de las mujeres, desatando debates y preocupaciones por los casos de anorexia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario